Este año 2020 pasará a la historia por la suspensión de las estaciones de penitencia de las hermandades de Almería y en general, de toda España, debido a la pandemia del COVID-19, que ha provocado la declaración del estado de alarma en nuestro país y la toma de una serie de medidas de prevención extraordinarias en nuestro territorio para frenar la propagación del virus, que afecta a miles de personas y ha provocado centenares de muertes.
Entre estas medidas se encuentra la prohibición de concentraciones masivas de personas, que serían alarmantes foco de expansión del coronavirus. Por ello, desde el obispado de Almería, el Ayuntamiento de la Ciudad y la Agrupación de hermandades se ha llegado al acuerdo de suspender todas las procesiones de Semana Santa en este año 2020 en un comunicado conjunto.
La Hermandad del Silencio, como ha hecho hasta ahora, asume de manera responsable y sensata dicha suspensión de su estación de penitencia y, como hemos venido anunciado en estos días, respetará la asunción de una serie de medidas dirigidas a evitar actos y eventos en los que la concentración de hermanos en nuestra casa de Hermandad y sede canónica habría sido irresponsable e innecesaria.
En primer lugar, queremos recordar a nuestros hermanos que la suspensión afecta a la salida procesional de nuestras cofradías, no a la celebración de la Semana Santa y de la cuaresma, que, viviremos de una forma muy distinta a como estamos acostumbrados como sociedad y como cristianos. Ahora más que nunca debemos ofrecer nuestra oración y nuestros sacrificios personales y comunitarios por la sociedad española, por los enfermos y afectados por el coronavirus, por quienes han fallecido debido a la pandemia, por los profesionales sanitarios, por nuestros gobernantes y por el pronto restablecimiento social, laboral e institucional.
Igualmente, trataremos desde la Hermandad del Silencio, incrementar nuestra actividad en labores de comunicación para ayudar en la medida de lo necesario a vivir lo que resta de Cuaresma y la Semana Santa del lado de nuestra fe y aferrados a la oración.
En el plano cofradiero, nuestra corporación va a actuar, como hasta ahora, de manera consecuente y responsable. Se suspende de manera definitiva el reparto de papeletas de sitio que había sido habilitado de forma online, la limpieza de enseres y el montaje de nuestros pasos previsto por Mayordomía y Priostía, así como otras labores preparatorias de la estación de penitencia. Igualmente, nuestra casa de hermandad quedará cerrada mientras establezcan las autoridades que es necesario mantener estas recomendaciones.
En lo que respecta a los Cultos al Señor de la Redención, que deberían de empezar el próximo viernes con el rezo público del Vía Crucis por las calles de la feligresía, algo ya suspendido por parte del obispado de Almería, así como el Quinario, el devoto besapiés y la Solemne Función Principal de Instituto. En los próximos días, en función de la sucesión de los hechos, informaremos sobre el proceder con los actos y cultos que se puedan celebrar en distinta forma y tiempo.
Por último, la Junta de Gobierno no cejará en su llamamiento a todos sus hermanos y devotos para que sigan de manera responsable las indicaciones de las autoridades sanitarias y gubernamentales. Ahora, el mayor ejercicio de amor al prójimo que podemos realizar es no poner en riesgo a nuestros familiares, vecinos, amigos, etc., con acciones irresponsables e innecesarias.
Rogamos al Señor de la Redención y a la Santísima Virgen del Consuelo, escuchen la oración que dirigimos en estos días en súplica por el cese de la propagación de este virus y rogando que sostengan en su labor a los especialistas que atienden a los afectados.
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